En el mercado modelo de Mala se mostró el camarón que medía 48 cm. un tamaño fuera de lo normal, el cual, había sido capturado a la altura de “puente viejo” entre Mala y San Antonio.
El sorprendido joven manifestó que al terminar su jornada diaria se daba su último chapuzón cuando siente entre las raíces algo extraño, un movimiento brusco que le intimidó por un momento , pensando que era un reptil en las aguas turbias del río pero reaccionó, lo tomó con energía lanzándole hacia la ribera, grata fue su sorpresa y no creía lo que sus ojos estaba viendo.
DEBEMOS CUIDAR EL CAMARÓN
Esta especie preciada en el arte culinario de la zona (chupe y ceviche de camarones), en la presente temporada ha tenido abundancia en su recurso según los entendidos comparando con otros años, ayuda a la alimentación, puesto que el caudal del Río Mala se presentó constante desde el mes de diciembre, enero, febrero por las lluvias en la sierra de Lima por lo que los camarones se desarrollaron y aumentaron su población considerablemente.
Lo que si ha llamado la atención es el poco interés de autoridades del sector para preservar y proteger éste producto en extinción.
