
Gracias a este proyecto, 680 fruticultores de ocho Comunidades Campesinas de las provincias de Huaura y Oyón reciben capacitación y desarrollan diferentes actividades con el objetivo de optimizar la disponibilidad del agua de riego para la producción de melocotón, palto y chirimoya, y para implementar técnicas adecuadas de producción que les permitan mejorar la calidad de sus frutos.
Además, los agricultores reciben asesoría para el fortalecimiento de la gestión empresarial, a fin de articularlos a la cadena productiva y contribuir, de manera sostenible, con la mejora en sus ingresos. Todo ello, desde un enfoque de respeto al conocimiento local y al medio ambiente.